Firma del catálogo de la exposición por el artista

Sábado 19 de noviembre de 2022, de 15.00 a 18.00 horas

En el marco de PhotoSaintGermain, la Galerie d'art Arenthon de París invita al arquitecto y fotógrafo Emmanuel Biard a presentar su serie "Nocturne", en diálogo con grabados de Hans Bellmer y Stanley William Hayter.

Cada año, desde 2020, la Galerie invita a un fotógrafo contemporáneo a exponer su obra junto a grabados escogidos de su colección de obras modernas. Además de brindar a los aficionados a la fotografía la oportunidad de descubrir el grabado, este intercambio crea puentes estimulantes y alegres entre estas dos prácticas de creación de múltiples sobre papel.

Este año, intentamos humildemente reunir la obra del fotógrafo y arquitecto Emmanuel Biard con los grabados de Stanley William Hayter y Hans Bellmer. Se trata de la primera exposición individual de Biard, que ya se enfrenta a las obras de grandes artistas del siglo XX.

La elección de los grabados en diálogo con las fotografías deEmmanuel Biard fue intuitiva. Los vínculos formales parecían obvios: las líneas vegetales de las fotografías respondían a las líneas ondulantes de los grabados de Hayter; la precisión del arquitecto se hacía eco de la línea virtuosa de Bellmer, diseñador industrial de formación; los negros profundos y los tonos grises de las fotografías respondían a las transparencias e intensidades de los grabados negros de Hayter; el erotismo de Bellmer revelaba la extraña sensualidad de las imágenes de Biard. Pero como siempre, la intuición revela un bosque de vínculos ocultos, que emergen a medida que se profundiza en la obra de cada artista.

Perdido en esta oscuridad

Emmanuel Biard es un arquitecto que descubrió la fotografía cinematográfica durante sus estudios. Durante un taller dirigido por Antoine d'Agata en Arles en 2016, Biard experimentó por primera vez con la fotografía nocturna, utilizando la tecnología digital y el flash. Descubrió una forma diferente de producir imágenes. Desde entonces, desarrolla su serie Nocturne, que reúne instantáneas tomadas de noche, casi a ciegas, deliberadamente subexpuestas, con la profundidad de campo reducida al mínimo, el fondo permaneciendo en la oscuridad y sólo los elementos más cercanos revelados a la luz incisiva del flash.

En sus andanzas nocturnas, el fotógrafo deja que actúe el instinto, que tome forma la feliz aparición. Y gracias al dominio de su técnica, capta representaciones de lo invisible y de un paisaje interior manifiesto1. El fantasma se desliza en la oscuridad, en los negros aterciopelados, los desenfoques o los detalles cincelados. La totalidad del sujeto se oculta, mejor para desearlo. Las profundidades de la noche pueden parecer aquí amenazadoras, hasta el punto del abandono, de la aceptación de una realidad oculta.

Galería Arenthon

Una inquietante extrañeza

Las fotografías deEmmanuel Biard evocan ese sentimiento de losiniestro, definido por Freud en su ensayo Das Unheimliche en 19192 y estudiado en profundidad por Hans Bellmer3: esa sensación inquietante, casi aterradora, de un universo familiar pero ajeno, que evoca el regreso a la superficie de lo enterrado; una emergencia de lo íntimo, desde las profundidades de la noche y el sueño.

Para Hans Bellmer, fue ante todo la creación de su Poupée y las numerosas fotografías en las que la retrató lo que despertó este sentimiento de inquietud. En sus grabados, basados en sus numerosos dibujos, el entrelazamiento de líneas secas y curvas voluptuosas esboza un objeto-sujeto súbitamente transformado en otro, creando anagramas visuales y poéticos que invocan esta extrañafamiliaridad4. Para Hans Bellmer, el grabado añade sensualidad al dibujo, creando un efecto de relieve en el papel al imprimir los surcos5. El entrelazamiento de la arquitectura y la carne, de lo construido y lo orgánico, hace del cuerpo un paisaje por explorar, un territorio propicio para la aparición del inconsciente, la fantasía y la destrucción.

El gesto intuitivo

Al igual que su contemporáneo Hans Bellmer, Stanley William Hayter estuvo próximo al grupo surrealista. Para él, la técnica del grabado estaba totalmente al servicio del inconsciente en sus creaciones, yendo más allá de un simple medio de reproducción. La experimentación y la enseñanza estuvieron en el centro de su vida de artista: en 1927 fundó el famoso Atelier 17, donde enseñó el arte del grabado a los más grandes artistas de la época (Picasso, Giacometti, Miró, Ernst, Tanguy, Dalí, Viera Da Silva, Chagall o Motherwell, Rothko, Pollock durante su periodo americano).

Mientras que los trazos de Bellmer parecen controlados, los de Hayter son libres, orgánicos y viscerales, tendiendo hacia la abstracción (que abrazó plenamente a partir de los años 40)6. La implicación del cuerpo y el movimiento revelan lo imaginario y lo inconsciente. Las formas parecen surgir de su noche interior, los ángeles luchan, los caballos salvajes asoman la cabeza... Al igual que el gesto de Biard, que fotografía en la oscuridad, el de Hayter es instintivo. El artista adopta una postura de abandono a la creación: gracias a un perfecto dominio de la técnica, puede liberarse de ella y crear un grabado puramente intuitivo.

Para Hayter, Bellmer y Biard, la producción de imágenes es tanto un ejercicio de introspección como de exteriorización, que revela una tensión entre la pulsión interior y la liberación creativa.

Catherine Tanazacq

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[1] El vínculo con la obra del fotógrafo ciego Evgen Bavčar es evidente, aunque Emmanuel Biard no está familiarizado con su obra. Véase Evgen Bavčar, Le voyeur absolu, 1991, Ed. Seuil, París.

[2] Sigmund Freud, L'inquiétante étrangeté et autres essais, traducción de Marie Bonaparte, Gallimard, serie Folio essais, París, 1988.

[3] Véase Fabrice Flahutez, Ce que cache l'image, ce que montre la Poupée, París, 2005. [en línea].

[4] Das Unheimliche ha sido traducido por François Roustang como étrange familiarité, Nouvelle Revue de Psychanalyse nº 14, 1976, pp. 85-116.

[5] Véase Fabrice Flahutez, "Hans Bellmer : l'anagramme et l'estampe au service d'un rêve surréaliste", Histoire de l'art nº 52, 2003, pp. 79-94. [En línea].

[6] Véase Anne Béchard-Léauté y Laurence Tuot, "Stanley William Hayter: Les nouveaux gestes de la gravure", Interfaces n°39, 2018. [en línea].