Laurencin, Marie

Marie Laurencin, nacida en París el 31 de octubre de 1883, es una figura clave del arte moderno francés. Marcada por un origen atípico y una determinación inquebrantable, superó los contratiempos en la escuela para dedicarse plenamente a su pasión: el dibujo y la pintura. En contra del consejo de su madre, ingresó enla École de Sèvres, donde estudió pintura sobre porcelana, antes de continuar su aprendizaje artístico en laAcadémie Humbert a partir de 1903. Allí perfeccionó sus habilidades en el dibujo, la pintura y el grabado, al tiempo que desarrollaba un estilo singular que marcaría su época. Leer más

Marie Laurencin (1883-1956)

Fue en el corazón de este fermento artístico de París donde tuvo algunos encuentros decisivos, en particular con Georges Braque y Pablo Picasso, dos pilares del cubismo. Se unió al círculo Bateau-Lavoir y se convirtió en una figura emblemática de la bohemia de Montmartre. Su relación con el poeta Guillaume Apollinaire, que se convirtió tanto en su amante como en su mentor, ejerció una profunda influencia en su visión artística.

Marie Laurencin desarrolló un estilo único, a menudo descrito como "femenino y poético", que se diferenciaba del cubismo tradicional por su enfoque más suave y lírico. Sus lienzos están impregnados de tonos pastel, figuras gráciles y siluetas evanescentes, a menudo dominadas por tonos rosas, grises y azules pálidos. Sus retratos de mujeres, impregnados de delicadeza y misterio, revelan una rara sensibilidad que contrasta con las tendencias masculinas y a menudo rígidas de la época.

En la década de 1920, Laurencin amplió su campo artístico trabajando para los Ballets Rusos de Serge Diaghilev, donde diseñó decorados y vestuario. También se estableció como una cotizada retratista, captando con finura los rostros de la élite cultural y aristocrática europea.

Más allá de su arte, Marie Laurencin fue una mujer independiente que se negó a ajustarse a las expectativas de su época. Sus pinturas, aunque a menudo suaves y soñadoras, transmiten un poderoso mensaje sobre el lugar de la mujer en el arte y la sociedad. Hoy se la reconoce como una artista pionera que allanó el camino a una forma singular y asertiva de expresión artística femenina.

Marie Laurencin murió el 8 de junio de 1956 en París, dejando tras de sí un legado artístico intemporal que se celebra en los museos más importantes del mundo, como el Musée de l'Orangerie y el Musée d'Art Moderne de la Ville de Paris. Su obra sigue inspirando y fascinando, dando testimonio de la modernidad y delicadeza de su visión del mundo.